Castillo de Almourol, fortaleza en mitad del Tajo
Portugal es tierra de Castillos. Lugares mágicos con grandes y sólidas piedras que nos sorprenden en mitad de la nada. Un buen ejemplo es el Castillo de Almourol, una fortaleza que se levanta en mitad de un islote, solitaria y majestuosa. Está situado en Vila Nova da Barquinha, en mitad del río Tajo, en el distrito de Santarém, sorprendiendo a los turistas cuando aparece en el horizonte.
Está a poco más de una hora de Lisboa, por lo que se puede perfilar como una excursión estupenda desde esta ciudad.
El origen de esta fortaleza es incierto; y es que aunque en 1129 los cristianos reconquistaron la zona, y por tanto, el castillo, no se sabe muy bien quién comenzó a habitar este islote. Aun así, todo parece apuntar que fueron los romanos quienes crearon la primera fortaleza, y que a su vez estos, aprovecharon un antiguo asentamiento fenicio.
Entre 1169 y 1171, fue completamente reconstruido por la Orden del Temple Gualdim Paes. Fueron años dorados para el castillo. Una época en la que se cuidó muchísimo sus instalaciones mejorándolas por completo; y es que su situación era aprovechada para controlar el tráfico de mercancías, utilizando así el Tajo como una aduana natural entre norte y sur. No obstante, tras la extinción de la Orden perdió todas sus funciones y su interés estratégico y fue abandonado.
Este testigo de varias civilaciones tendría que esperar hasta el siglo XX para un nuevo uso; y es que por esta época, el castillo se usó como residencia oficial de la República Portuguesa siendo así el escenario de eventos como el Estado Novo.
Cuenta con una gran planta cuadrangular y está dividido en dos recintos, el interior y el exterior. El exterior destaca por una muralla reforzada por hasta nueve torres circulares realmente imponentes. A su vez, el interior cuenta con una atractiva torre del homenaje de tres plantas.
Si bien es cierto que no está muy dañado, el estado de conservación no es el mejor que se podría esperar. Aun así está catalogado como Monumento Nacional. Además, hay que decir que este lugar fue la inspiración de las aventuras ficticias de la novela de caballería Palmerín de Inglaterra.
Otros castillos de interés:
Foto vía: Mario Tome
Categorias: Santarem